Vídeo: la aurora boreal sobre Reykjavik
El espectáculo de la Aurora Boreal es uno de los grandes motivos para viajar a las gélidas regiones del norte de Europa. Uno de los escenarios más sugerentes para disfrutar de esta experiencia es Islandia, especialmente entre los equinoccio de otoño y el de primavera, es decir, entre septiembre y marzo. Para demostrarlo, te traemos hoy este maravilloso vídeo.
Sólo en Islandia: volcanes y auroras boreales
Muy pocas veces la naturaleza nos brinda la oportunidad de disfrutar de espectáculos como éste: la erupción de un volcán en la noche bajo el manto mágico de una aurora boreal. Sucede solo en Islandia, gracias al viento solar chocando contra el campo magnético de la Tierra en estas latitudes y a la lava incandescente que sale del cráter del Bardabunga.
Krystall, el hotel flotante para ver la aurora boreal
Si lo que quieres es tener las mejores vistas de la Aurora Boreal, la primera regla es viajar al norte; la segunda, buscar una ubicación alejada de los focos de contaminación lumínica, como las ciudades. O mejor todavía, hacer tu reserva en el Krystall, el nuevo hotel flotante que se va a construir a unas cuantas millas marinas del puerto noruego de Tromso, en pleno Océano Glacial Ártico.
Kakslauttanen: un hotel para ver la Aurora Boreal
Imagina un poblado compuesto por iglús con le techo de cristal, cálidos y acogedores a pesar de estar rodeados del hielo y la nieve. ideales para tumbarse y disfrutar del maravilloso espectáculo natural de la Aurora Boreal. Este lugar existe, se llama Hotel Kakslauttanen y se encuentra en el corazón de la Laponia finlandesa.
El espectáculo de la Aurora Boreal en Noruega
Uno de los espectáculos naturales más fantásticos cuando viajamos a Noruega es el de la Aurora Boreal, un momento mágico que puede disfrutarse entre el equinocio de otoño y el de primavera (21 de septiembre al 21 de marzo), siempre que la nieve y el mal tiempo no nos priven de este placer.
Iglús de cristal para ver la aurora boreal
Septiembre y octubre; y hasta marzo y abril del próximo año, son los meses más propicios para subir hasta el norte y disfrutar del increíble espectáculo que ofrece la aurora boreal. Un fenómeno de luminiscencia atmosférica que tiñe de color todo el cielo y mueve pequeñas ondas y rizos de distintas tonalidades. El principal inconveniente es que, al producirse en los países próximos al círculo polar, el frío es tan intenso que pocos son los que logran aguantar el tiempo suficiente para verla en todo su esplendor.